Momentos
Hay momentos en que me siento apesadumbrada
no es sufrimiento, es la realidad que siempre
me confunde
en donde el dolor cada vez más se
adivina
donde no hay dispensa por más tristezas
que atraviese
los grises nubarrones viajan y se
amontonan
cubriendo hasta la infinidad de luces de
las estrellas.
Hay momentos en que me siento
desorientada
no es sola, es excesivamente diminuta
en donde el silencio me abarca y me
revela
donde la luz del día me quita el miedo
y el sol me recuerda la tibieza de estar
viva
y los cantares de las aves me llenan de
frescura.
Hay momentos en que me siento enredada
no es atada, es incapaz de torcer
algunos rumbos
en donde asisto a mi naturaleza humana
donde me sublevo a los tiempos que no
son míos
mirando un par de agujas divinamente
acompasadas
me traen a la memoria que mi tiempo no
es el de otros.
Hay momentos en que me siento devastada
no es extenuada, es fatigada de subir
montañas y colinas
en donde los verdes valles me dan
sosiego
donde la hierba bajo mis pies son mullidos
tapices
abanicos de luz reflejados en la retina
de mis ojos
gotas de rocío mojando mi sedienta boca.
Hay momentos en que me siento radiante
no es brillo, es la plenitud de sentirme
completa
en donde el amor se manifiesta de mil
formas
donde ni sospecho los disfraces con que
me deslumbra
hoy un beso, una caricia, un abrazo, un
sueño cumplido
mañana, ver el movimiento de tu pecho
respirando aire puro.
Hay momentos en que me siento tan en la
tierra
no es temporal, es un soplido fugaz del
viento en el agua
en donde se ondula la superficie que
camino
donde temblequean mis piernas y también
mi destino
un atardecer rojizo se derrite en el
horizonte
y una luna gorda se le enfrenta
susurrando hasta mañana.
Dedicado a la memoria de mi amado hermano Marcelo
Agosto 20, 2016
Patricia Bertacchi Pepe
Hay momentos en que me siento apesadumbrada
Hay momentos en que me siento enredada
Agosto 20, 2016