Saludo de bienvenida

Soy Patricia Bertacchi, autora del diseño y los contenidos de este espacio. Aquí encontrarán un lugar donde refugiarse entre mis pasiones y sentimientos, que bien podrían ser los mismos de ustedes, tomando forma en poemas, cuentos, fotografías, opiniones y comentarios, artículos del Rincón Gastronómico de la Revista C&A Carnes y Alimentos, lecturas, crónicas de viajes y hasta alguna receta. Bienvenidos a mi hogar virtual!

sábado, 18 de octubre de 2014

Un Viaje de Diez Metros

 

Film: Un Viaje de Diez Metros - Título original: The Hundred-Foot Journey

 
 
 
Una amiga me recomendó ver esta película. Me dijo, son los temas que te gustan, hay mucho de cocina. Me quedó dando vueltas la idea de verla en cuanto tuviera tiempo. Lo hice al otro día, debido al apetito que tengo de ver buen cine, últimamente me siento insatisfecha, pero no por la falta de producciones sino por guiones y escenarios que me cautiven.
He tenido la fortuna de "paladear", unas cuantas películas que baten y mezclan ingredientes como la cocina, el amor, la superación, los sueños, el sexo, los dramas existenciales y tristezas, y siempre salgo saciada emocionalmente.

Un viaje de diez metros, es un exquisito plato que conjuga todo lo que los amantes de la buena cocina o el buen cine, queremos "saborear". Tiene los colores intensos del cúrcuma mezclados con la frescura y poco sencilla palatabilidad del cardamomo. Diálogos irónicos y atrevidos con respuestas agudas, se dan entre dos de los personajes del film, Madame Mallory, dueña del restarurante Le Saule Pleurer, que itenta conquistar su segunda estrella Michelin y Papa, un viudo perspicaz de origen hindú, que migra con su familia buscando un nuevo horizonte, recalando en la atractiva aldea de Saint-Antonin-Noble-Val, en el sur de Francia. Los paisajes, de un pueblo y una granja perdidos en Francia, no necesitan descripción alguna. El despliegue de toda una gama de verdes, le da a la locación del film una sensación de la maravilla de la creación, dejando al espectador pasmado en la butaca. Igualmente ocurre con las puestas de sol. El erotismo, se desprende como el aroma de cada plato que presentan, en un ralentí, que logra aumentar tanto el impacto visual como emocional, casi desnudando los ingredientes frente a nuestros ojos. Podemos ver desde el inicio de la película, el contacto de Hassam con su madre, cuando ella le impregna el arte de la degustación frente a una sopa de erizos. Es un momento sublime, de verdadero placer, cuando los alimentos en un acto de intimidad con el paladar y la lengua, son saboreados.
Como el massala, (mezcla de diferentes especias usado en la cocina hindú), Un viaje de diez metros, combina varios idiomas, (inglés, hindú y francés), algunos actores desconocidos y de variados orígenes, la canadiense Charlotte Le Bon en su rol de Marguerite; la inglesa Helen Mirren como Madame Mallory; hindúes, Om Pure (actor de destacadísima actuación en Bollywood) como Papa, Manish Dayal como Hassam Kadam y otros, el director sueco Lasse Hallström (Chocolat), música del hindú A.R. Rahman y la producción de Steven Spielberg y Oprah Winfrey.
Cuando uno intenta abreviar la opinión de un film, puede caer en el simplismo o la falta de  un vocabulario apropiado para transmitir al otro, la experiencia vivida  frente a esa realización.
Les comparto que durante los ciento veintidós minutos que dura la película, intenté frenar la próxima escena para seguirme deleitando de la que estaba viendo y la emoción me invadió de forma insolente, llevándome hasta las lágrimas. Quizás sea una opinión subjetiva pero no dejen pasar de verla. Conociéndome, sé que entra dentro de mis mimadas y la veré cien veces.
En síntesis, me sedujo e hizo de mí lo que quiso.

 
Música: A. R. Rahman


 
Imágenes de Saint-Antonin-Noble-Val, Francia