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Soy Patricia Bertacchi, autora del diseño y los contenidos de este espacio. Aquí encontrarán un lugar donde refugiarse entre mis pasiones y sentimientos, que bien podrían ser los mismos de ustedes, tomando forma en poemas, cuentos, fotografías, opiniones y comentarios, artículos del Rincón Gastronómico de la Revista C&A Carnes y Alimentos, lecturas, crónicas de viajes y hasta alguna receta. Bienvenidos a mi hogar virtual!

viernes, 14 de diciembre de 2018

Crónicas Patricias: La Cité de Carcassonne, Departamento de Aude, Región de Occitania, Francia




Instalada en otro tiempo, contemplo la ciudad histórica fortificada de Carcasona, la Cité de Carcassonne en francés, Ciutat de Carcassona en occitano, la mágica capital del Departamento de Aude en la Región de Occitania, Francia. 
La arquitectura medieval de la ciudadela, fue restaurada en el siglo XIX por Eugène Viollet le Duc, un reconocido arquitecto restaurador de la época. En 1997 pasa a formar parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO. 
Cuenta con una población de 46.000 habitantes que no están solo en la cité. Extra muros, hay una ciudad nueva, la Bastida de San Luis construida en el siglo XIII en el reinado de Luis IX. 
En torno a la ciudad se pueden ver los viñedos de la región.


Nada más al llegar a la cité médiéval, me sentí atrapada por el encanto de su doble muralla, torres, pináculos de pizzarra y teja y barbacanas. Ingresando, sigues envuelto y seducido por sus calles empedradas, cuestas, plazas, farolas, luces tenues y amarillentas, basílica, castillo y un cielo nocturno azul intenso.
Los comercios se abren a mi paso con mucha coquetería, son pequeños, elegantes y estéticos, con muy buen gusto ofrecen sus mercaderías en las vidrieras.

El clima es caluroso y seco, estamos en pleno verano, entre días de sol, grises y viento se puede sentir el polvo en los pies, ropa, cabello y orificios nasales. 
Se convierte en una experiencia casi onírica, a la caída del sol. El rumor de batallas de hace siglos atrás, relinchos y cascos de caballos, resuenan en la liza o llano entre las dos murallas de esta antigua cité mientras paseas. En esa maravillosa atmósfera,  entre el pasado y el presente, apuesto que hasta "verás" pasar caballeros partiendo a galope por las puertas que vivieron innumerables ataques. Particularmente soy una enamorada de lo medieval, me encantan estos lugares debido a que vivo las historias que leo o me cuentan los guías. Normalmente son personas enamoradas de su país, pasado e historia, y yo me dejo llevar por los relatos.


Mapa de Aude, Francia


Carcasona es un lugar estratégico, con más de 2500 años de historia, desde una colina domina el valle del Aude antes que el río siga su curso al Mar Mediterráneo. Situado entre la Montaña Negra al Norte y la Región de Razès al Sur, controlaba el paso de comerciantes, tribus y ejércitos. Es muy cercana a las rutas que unen el Atlántico con el Mediterráneo.
Excavaciones arqueológicas demostraron la existencia de asentamientos en el siglo VI a.C. Fue testigo del trasiego comercial de los fenicios y posteriormente de los griegos que marcaron las costas mediterráneas. 

La cronología de Carcasona con sus vicisitudes históricas y políticas, aún haciéndola breve, resulta abundante en hechos y extensa en el tiempo. De todo lo que he leído, trataré de ir aportando datos de forma amena y concisa para que queden atónitos de todo lo que ha vivido.

Hacia el año 118 a.C. se funda la primer colonia romana en Francia, en Narbona, por Licinius Crassus, político y militar romano. Entre el 43 y 30 a.C. se funda la colonia Julia Carcaso y el "castellum" Carcaso. ("castellum" en latín significa pequeña ciudad fortificada, sede de administración civil y militar del lugar, cuyo administrador es el pretor y su residencia oficial es el pretorio)
En el Siglo III d.C. se protege la colonia de Carcaso, con murallas y torres, tras las primeras invasiones bárbaras. 
Para el 412 los visigodos ocupan la ciudad. 
En el 507, Clodoveo, primer rey cristiano de todos los francos y fundador de la dinastía merovingia, vence a los visigodos en  la batalla de Vouillé (Vienna). Fue una terrible lucha, donde el experimentado ejército franco se enfrenta al del rey de los visigodos, Alarico II. 
Clodoveo, en una espectacular lucha cuerpo a cuerpo logra matar a Alarico. Los francos entonces, avanzan conquistando todas las posesiones visigodas en la Galia, mientras estos huyen despavoridos tras la victoria de los francos, refugiándose en Hispania (Península Ibérica) y conservando la Septimania (Gard, Harault, Aude, Pirineos Orientales)




En el 711 los árabes llegan a España y hacen incursiones a Septimania, llegando hasta Carcasona. La toman en el 725. 
En el 732 los árabes son vencidos por Carlos Martel en Poitiers y expulsados a España, conservando la plaza de Carcasona a pesar del aislamiento. 
Alrededor del 750, Pipino el Breve, hijo menor de Carlos Martel, es quien pone fin a la dinastía merovingia (familia de estirpe germánica, descendientes de Meroveo, que gobernaron la actual Francia, Bélgica, parte de Alemania y Suiza entre los siglos V a VIII), encabezando a los francos y a las tribus visigodas que habían permanecido en Septimania, recuperan Carcasona y comienza el dominio carolingio (nombre derivado de su fundador, el mayordomo de palacio y vencedor de la batalla de Poitiers, Carlos Martel). Uno de los jefes francos es nombrado el primer conde de Carcasona. Hay algunas discrepancias pero se da en llamarlo Bellón de Carcasona.
En 1067 el feudo de Carcasona pasa a ser parte de la Casa de Barcelona. 
Alrededor del año 1130 comienza la construcción del castillo condal de Carcasona y en el 1150 se consagra la catedral románica de San Nazario mientras en todo el condado de Toulouse se expande la religión cátara y contra la cual el Papa convoca una cruzada. 
Para el 1209 los caballeros franceses del Norte, a las órdenes de Simón de Montfort, invaden el condado de Toulouse. El 1° de agosto de ese año, Montfort pone sitio a Carcasona y dos meses más tarde es tomada, probablemente por traición, sus habitantes serán desterrados. El 10 de noviembre del mismo año muere el Vizconde Raimundo-Rogelio, encarcelado en una de las torres de su propia ciudad amurallada. El feudo pasa a manos de Simón de Montfort, quien muere en 1218. Lo sucederá su hijo Amaury, perdiendo paulatinamente los territorios conquistados por su padre. 
En 1223 Raimundo VII sitia Carcasona.
Amaury firma un tratado de paz a las puertas de la ciudad el 14 de enero de 1224, antes de regresar a Ile de France. 
El 19 de enero del mismo año, Raimundo II Trencavel ocupa Carcasona, a pesar del tratado firmado. Amaury cede a su señor el rey de Francia Luis VIII, los feudos adquiridos por su padre. 
Luis VIII ocupa Carcasona en junio de 1226 sin combate.
En 1229 el tratado de París pone fin a la Cruzada y anexa la mayor parte del Condado de Toulouse. 
En agosto de 1240 Raimundo II Trencavel, refugiado en Aragón, organiza un ejército que avanza para sitiar a Carcasona. El 12 de octubre los refuerzos enviados por Luis IX llegan a Carcasona y obligan a Raimundo II a levantar el sitio. 
Luis IX destierra a los habitantes de la ciudad situada fuera de la muralla, que es arrasada. En 1247 permite a los antiguos habitantes establecerse en la orilla izquierda del río, que luego se convierte en la actual ciudad baja. Además construye la muralla exterior, tras cuya protección perfecciona la muralla interior. 
Entre 1270 y 1285, su hijo, Felipe III el Atrevido, completa los trabajos emprendidos en el reinado de su padre. En más, la ciudad será inexpugnable. En 1353, el Príncipe Negro, llamado así probablemente por el color de su armadura, (Eduardo de Woodstock, Príncipe de Gales. Primogénito del rey Eduardo III  de Inglaterra) incendia la ciudad baja pero no toca la fortaleza. 
En 1659 se anexiona el Rosellón al reino de Francia. Carcasona deja de ser una plaza fuerte fronteriza y así se adormece  la ciudad dentro de la fortaleza, que el tiempo y la indiferencia comienzan a destruir.
En 1835 Mérimée da la voz de alarma y en 1844 se confía la misión de restauración de la Catedral de San Nazario a un reconocido arquitecto restaurador, Eugène Viollet le Duc.
Tristemente en 1850 decretan la demolición de la totalidad de la fortificación, logrando artistas e intelectuales, y el historiador  Jean Pierre Cros de Mayrevieille la anulación. Eugène Viollet le Duc comienza la restauración de la arquitectura militar. 



Farola del Hotel Le Donjon
Puerta de entrada a la Basílica de San Nazario y San Celso de Carcasona, 
declarada basílica menor  en 1898 por León XIII, 
ostentó título de catedral hasta el año 1801.

Basílica de San Nazario
La Catedral de San Nazario y San Celso data de 1096. El Papa Urbano II bendijo el 12 de junio de ese año, las piedras para su construcción. Es de plano cruciforme, con una nave románica amplia. Tiene 22 hermosas y coloridas vidrieras con dos rosetones, donde podrás contemplar narraciones y dejarte atravesar por la espiritualidad de la luz.


Basílica de San Nazario y San Celso de Carcasona

Puerta de salida al llano polvoriento entre las dos murallas

Vista nocturna de torres, cúpulas y almenas de la doble muralla de Carcasona

El encanto y magia de la noche, caminando por el llano entre las dos murallas,
es un viaje a siglos atrás en el tiempo y la historia.

Una de las tantas torres que tienen las murallas. Cada una tiene nombre propio como las puertas 

Fascinante caminata nocturna alrededor de la cité médiéval.
Es de lo más bonito que puedes atesorar, la sensación de andar a medias luces en esa
hermosa construcción de arquitectura militar.


Vista desde una de las puertas de la fortaleza

Clara presencia de las dos murallas

En un paseo nocturno por este mundo medieval, 
por momentos te hace dar escalofríos

Vista exterior del Castillo Condal de Carcasona
El Castillo de Carcasona es una fortaleza dentro de otra fortaleza, la ciudadela amurallada. Lo realizaron los vizcondes de Trencavel, vasallos de los condes de Toulouse, perdiendo el dominio de Carcasona en el transcurso de las luchas contra las herejías. 
Se pueden apreciar en la fotografía los matacanes, galerías de madera que servían para tirar cualquier tipo de proyectiles contra los asaltantes. La barbacana del castillo, de forma semicircular, es el acceso al castillo, y por encima del foso hay un puente de piedra.
Carcasona deslumbra por su arquitectura militar, por el tamaño de sus murallas, por la historia que ellas narran con solo ver sus muros. No describiré cada detalle y los por qué de cada torre y sus nombres, ni a qué se deben sus formas curvas externas y rectas internas, las aspilleras, los puentes, puertas, formas de capturar al enemigo externo como interno entre diferentes sistemas entre puertas. Todo está calculado por hombres que sabían, entendían y luchaban sus propias guerras. Es maravilloso ese mundo de hombres en lucha, posesiones y desposeídos, desterrados y sitiados, el poder de los diferentes pueblos y dinastías, el poder de los papas, la fe, las cruzadas y los ríos de sangre y tinta que ha corrido a lo largo del tiempo y las diferentes tierras. Cada uno descubrirá aquí, sus deseos de pasar por este valle y su colina, donde se apoya la cité más grande de Europa. 
Para mí un lugar increíble, maravilloso. Realmente es un viaje en el tiempo y se mantiene en un excelente estado luego de su restauración. No hay mucha fotografía por la propia naturaleza del lugar, es una fortificación. Pero, tiene una vastísima historia que la eleva a un lugar de importancia en la línea del tiempo.  
Decidí alojarme dentro de la ciudad medieval. Vale la pena lo que te pueda salir de más el hotel, si te gusta como a mí, vivir las ciudades, experimentarlas, beberlas en sus vinos, degustarlas en sus productos regionales y platos insignias. O caminarlas cuando se te de la gana, al sol o a la luna, salir del hotel y a pocos metros tienes la plaza donde están la mayoría de los restaurantes, cafés, pastelerías, sentarte con sumo placer, a no hacer nada y dejarte llevar por la atmósfera de esa lengua tan hermosa que es la francesa. Apuesto que lo disfrutarán tanto como yo. 
Carcassonne, J'adore!!!




Muy pintorescos comercios de Carcassona crean un atmósfera increíble en la ciudad medieval

Con la luz del día todo tiene colorido, perdiendo ese aire enigmático de la noche

Hermosos espacios públicos como plazas, donde se encuentran lindos bares y restaurantes
Una noche calma y hermosa
Hotel de la Cité

Por donde se mire en Carcassona, todo se viste de encantamiento

Bonitos bares en trono a la Place Marcou

Pozo del siglo XVI, de cuarenta metro de profundidad en la Gran Plaza de Puits

Interiores del Hotel Le Donjon

Interiores del Hotel Le Donjon

Interiores del Hotel Le Donjon

Place Marcou

Interiores del Hotel Le Donjon
Brasserie Donjon frente al hotel con una muy buena locación, carta, cocina y servicio


Nos recomendaron este vino de la zona y resultó excelente.
Sauvignon - Chardonnay de los viñedos de las laderas
 expresan las bondades del terroir de la cité medieval.
En nariz se perciben flores y frutas de notas cítricas,
es fresco y armonioso, redondo en boca.
Un descubrimiento.
Como bien sabemos, la cocina francesa se las trae desde épocas pasadas. No deja a nadie relajado con tanta información para los sentidos y la pancita. Francia es la cuna de la alta gastronomía, desde el momento en que los chefs incursionan en la revalorización de los platos de la aristocracia, aggiornando los clásicos (que los amo porque son dignos de manifestarse de otras formas y siempre dignos de aprecio), conjugando los productos regionales y dándole un giro inesperado en el aspecto nutricional, teniendo en cuenta en particular, los pequeños pueblos y las regiones (la cocina rural, la de entre casa), que ostentan las denominaciones de origen como un proteccionismo de todo lo que con amor produce su tierra, agua y aire. 
Para mí, la gastronomía es un tema de pasión total desde niña,  estudié años y ejercí docencia, he leído mucha literatura, degustado infinidad de platos, experimentado recetas, inventado muchas y hasta hoy sostengo que mis abuelos maternos fueron los que me marcaron por este gusto, como se decía en mi hogar, éramos de buen diente. Amaban la buena mesa y así crecimos.
En Francia se goza de la comida y de la bebida, cada rincón de este país tiene alguna especialidad. Y como no podía ser de otra manera, Carcassone tiene también sus platos típicos.  
En Carcassone hay muchos lugares para hacer las comidas pero comenzamos por la Brasserie Donjon, que es del mismo hotel en el que paramos y está muy bien presentado. Apenas ven que eres turista y te dicen, cassoulet! Lo pedimos. Viene presentado en una cazuela de barro que contiene un guisado de alubias y salchichas de la región, ave o cordero y terminado con un gratinado. La que comimos, se llamaba Cassoulet Languedocien, confit de canard. Exquisita!!! Una crema las alubias alargadas y carnosas, igual que el confit de pato, de sabor suave y delicado, la carne de pato se desprendía sola del hueso de les cuisses (muslos). Otros platos que comimos fueron, gazpacho, entrecôte grillée, soupe à l'oignon gratinée á la fleur de thym (sopa de cebollas gratinada a la flor de tomillo), cabillaud sauce safran (bacalao con salsa de azafrán),  crème brûlé (crema quemada), gâteau au chocolat noir, tiède et glace vanille (pastel de chocolate amargo, tibio y helado de vainilla). 
Amo la nouvelle cuisine por encima de la haute cuisine. Amo los pasos en la mesa. Es más ligera, cuidada en los condimentos, especias y presentación. Reitero, es elegante y sencilla, no tan pomposa como la alta cocina francesa. Cualquier aficionado a la gastronomía puede realizar un plato francés, ya que sus propios chefs han salido a recorrer el mundo para darnos sus experiencias. Uruguay cuenta con algunos de ellos. 
Brasserie Donjon

Restaurantes y bares en torno a una plaza en horas de la mañana.
Al mediodía no se puede caminar

Recuerdos de Carcassona

Un paseo precioso con el ruido de los cascos y ruedas que resuenan por la liza
entre las dos murallas

Una gárgola 

Una vista desde un punto alto de la muralla y a los pies la ciudad baja o Bastida deSan Luis
Muralla exterior de Carcasona

Torre en la fortificación 
Hotel de la Cité

Preciosa tienda de especias, sales, vainilla

Abriendo las ventanas para mostrar los productos 

Encantador comercio de especias

De todo para comprar

Un precioso lugar de ropa

Otro lindo comercio

Comenzando a llegar turistas al mediodía

Esta casa es una curiosidad de otros tiempos. Antiguamente se cobraban los impuestos
tomando en cuenta los metros cuadrados de construcción en el suelo.
Para sacar ventaja, se dice que el dueño, hábil comerciante,
construyó una segunda planta y más ancha que la inferior para evadir impuestos.



Bellísimo rosetón de la Basílica de San Nazario
Portada de uno de los transeptos


Paseo por el llano entre las murallas. Un paseo de unos 20 minutos.
Primer plano de la nave de la Basílica de San Nazario 

Rosetón Basílica de San Nazario

Vidrieras de la Basílica de San Nazario


Vista de la fachada Este del Castillo Condal. 
Las dos torre que custodian la entrada forman un conjunto de perfección única. 
Están unidas por una construcción suspendida sobre un arco de medio punto que cubre 
 la puerta de un matacán

Vista desde la ventana del Best Western Hotel Le Donjon en el corazón de la cité


Molinos de viento, los mismos que nos compraba nuestra abuela
en la Plaza Constitución de Paysandú, República Oriental del Uruguay
Un lugar de recuerdos con impresionante colorido

En todo viaje hay un muñeco

Ventanas en Carcassona
Reflejos de un atardecer entre nubes en mi ventana

Murallas almenadas en la más grande ciudad medieval de Europa 

Video de Carcasona



Jusqu'au prochain arrêt!!
Hasta la próxima parada!!