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sábado, 19 de agosto de 2017

Crónicas Patricias: Hondarribia o Fuenterrabía, Guipúzcoa, País Vasco, España



Fuenterrabía (en euskera y oficialmente: «Hondarribia») es una ciudad y municipio del País Vasco, España, situado en el extremo noreste de la provincia de Guipúzcoa, a unos 20 km al este de la capital, San Sebastián, en la desembocadura del río Bidasoa, que hace de frontera natural con Hendaya (Francia). 
La ciudad protegida ha sabido preservar su gran patrimonio natural e histórico, donde los vestigios romanos y medievales así como la arquitectura de principios de siglo y neo-vasca constituyen el decorado de sus calles.
Engarzado entre el mar y la montaña, es un lugar ideal para conocer.
El 18 de abril de 2003 conmemoró el 800 aniversario de la entrega de la Carta Puebla por el rey Alfonso VIII de Castilla, constituyéndose en la segunda villa de realengo guipuzcoana, hoy en día una de las más bellas del litoral cantábrico, un destino ineludible. Hondarribia fue ya habitada en el paleolítico, los vestigios más antiguos se localizan en lo alto del monte Jaizkibel, estando también acreditada la presencia de los romanos a través de los restos que a lo largo de los últimos años han ido apareciendo en las sucesivas excavaciones arqueológicas que sistemáticamente se realizan en el Casco Antiguo y otras zonas del municipio. Es la única ciudad amurallada en Gipuzkoa. 
Pero no todo eran guerras. Hondarribia fue también durante la edad Media un próspero puerto comercial desde donde se embarcan numerosos productos (trigo, vino, metales…) de Castilla y Navarra con destino a Flandes y otros puertos de Europa.
Parece ser que el primero que se ocupó de fortificar Hondarribia fue el rey Sancho II Abarca, de Navarra. También se interesó en ello Sancho VI el Sabio. Sancho el Fuerte de Navarra hizo en Hondarribia importantes fortificaciones tanto en casas-torre como de murallas.
Es una acogedora y tranquila ciudad que vive a orillas del río Bidasoa, protegida por el monte Jaizkibel y la bahía de Txingudi, abierta al mar Cantábrico. Por su posición estratégica y fronteriza ha sido sacudida por asedios, tratados de paz, bodas reales, intercambio de princesas y tantas otras cuestiones políticas.
Es como la llaman la tierra de las tres "almas", la ciudad amurallada, medieval y con elegantes palacios, el barrio colorido y vibrante de los pescadores y su hermoso entorno rural con los caseríos en el monte Jaizkibel.
Tradicional en sus festejos con la procesión del Viernes Santo, la ofrenda de los pescadores a la Virgen del Carmen "Kutxa entrega"  las traineras disputándose las Banderas de Hondarribia y el "Alarde" que cada 8 de septiembre conmemora la victoria en el asedio de 1638.
Hondarribia sorprende a cada paso que das, te dej cautivado y tentado de volver y seguirla conociendo.





























































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